PLAZA PÚBLICA

Blog y sentido: ¿cuáles son los límites de la participación?
Los blogs y su posibilidad de interacción entre bloggers y lectores inauguraron una nueva forma de “conversación” sobre todo tipo de contenidos sin límites. Las más 100 millones de páginas personales que existen hoy en la blogósfera abrieron un canal alternativo de participación impensado hace 10 años, posibilitando múltiples e infinitas formas de expresión y de compartir información. Como reflejo de este fenómeno, dos datos: cada día se suben 120.000 nuevos blogs a la red y se publican unos 1.500.000 posts que generan a su vez infinitos comentarios.

Pero ¿la participación de los comentaristas debe ser totalmente libre? ¿Qué pasa cuando se cae en la agresión?

Plaza Pública surgió como un espacio de participación ciudadana y debate, suponiendo que todo debate se enmarca en normas de respeto básicas que no creíamos necesario explicitar. Y, si bien esta Plaza Pública no sufrió “destrozos”, en otros blogs de Clarin.com, sí hubo quienes entraron para estampar sus agresiones.

Los blogs, ¿abrieron la posibilidad de opinar sin ningún tipo de norma?

¿Cómo se puede garantizar la libertad de expresión de los comentaristas sin publicar opiniones que ofendan a otros?

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